lunes, 5 de agosto de 2013

La política, la sociedad y las mediaciones

Últimamente percibí, en algunos ámbitos, cierta disconformidad relativa a las campañas para las PASO, la cual se atribuía al contenido de los mensajes, que se estimaba vacuo. Dicha queja, poco tenida en cuenta por los candidatos seguramente, proviene de gente que mantiene distancia con las organizaciones políticas (denotra manera daria otro lugar a los spots), pero a la vez, que mantiene algún interés por la política.

No sé qué peso tendrán en el recuento de los sufragios estos casos, pero sea el que sea no parece haber provocado en los partidos mensajes específicos. Tal vez un mensaje más expresivo (así lo apuntan muchos comentaristas, por ejemplo respecto del presente intento renovador en el peronismo) hubiera ocasionado pérdidas aún mayores.

Un problema aquí es que este tipo de análisis flota en aire, pero igualmente nos entregamos a ellos. Y no dejarán de estarlo cuando contemos con los datos. Los motivos se los reservan los votantes, secretos más aun que el voto mismo.

Lo que permite concluir esto es algo obvio, pero que no parece muy tenido en cuenta. Es que grandes porciones de la población están alejadas de las cuestiones relativas a los debates y las desiciones políticas, pero que a la vez no les resulta del todo indiferente, sólo que por algún motivo no logran insertarse en algún lugar donde interiorizarse lo sufuciente como para sentirse un poco más satisfecho con su conocimiento en la materia. Esto significa que no sólo los ámbitos de militancia resultan para ellos en alguna medida insatisfactorio, también lo hacen otros ámbitos de procesamiento social de lo polítoco, como los medios. Claro que esto puede no tener mayores consecuencias, pero marca tambien un campo en que algunas se podrían corporeizar.

No hay comentarios:

"siempre junto a la urbe"