viernes, 29 de abril de 2011

El conflicto de los grandes medios con los gobiernos latinoamericanos

Manolo linkea una nota de ‘el gran diario argentino’ donde se encuentra una crónica de un debate de intelectuales opositores, que también podrían llamarse, ya que está de moda (porque se habla de intelectiales K) como intelectuales anti-K.

Hay una pregunta de Eliseo Verón: “¿Por qué estos fenómenos neopopulistas están asociados a un conflicto con los medios de comunicación?”; que después responde: “construir al enemigo para construir la identidad implica una escenificación. Los medios son los grandes escenificadores de la sociedad (…) Los neopopulismos han tomado conciencia de la necesidad de usar los medios”.

Llama mucho la atención el comentario de la cronista (Susana Viau) al respecto: “Casi como para sí (refiriéndose a la manera en que Verón presentó la respuesta a su propia pregunta), esbozó una hipótesis que si no estaba cargada de verdad, al menos rebosaba inteligencia”.

No podríamos creer que escape a la cronista que el lugar donde se publica la nota es ni más ni menos un ‘medio de comunicación’ y, además, si no uno de los que son parecen parte del ‘conflicto entre el gobierno y los medios de conmunicación’, entonces uno de los que son parte; llama mucho la atención el que, ya que que tanto la respuesta, pero más la pregunta son, es obvio, en defensa del medio en cuestión o sea Clarín, entonces la misma cronista la califique como ‘si no verdadera’ entonces ‘inteligente’.

Los ultrakirchneristas blogueros nos tienen acostumbrados a escuchar cosas como “pero si esta nota es hecha por el mismisimo diario Clarín ¿con qué objetividad nos habla de un tema en el cual es parte?”. Para pensar. Un comentario que, si no cargado de verdad, al menos rebosa inteligencia.

Usé recién el mismo latiguillo que usaba la cronista pero en un sentido contrario, pero mi fin era mostrar que todo lo que él favorecía al argumento que quería apuntalar es pura ficción, tanto que se revierte con facilidad. Pero no es casual: cuando los diarios quieren decir algo llaman a alguien con supuestas luces sobrenormales para que lo digan y denostan a quienes sostienen lo contrario.

Ahora vayamos a los dicho por Verón. Empecemos por la respuesta.

Aclaremos un posible error en su interpretación: lo que se dice no es que el conflicto con los medios sea porque el gobierno necesita construirse un enemigo y entonces se pelea con Clarín. Lo que dice es que el gobierno necesita crearse un enemigo, y para eso tiene que ‘escenificar’; y como los grandes medios son los grandes escenificadores, tiene entonces que usar de los medios para tener acceso a la ‘escenificación’ y así poder crear su enemigo.

Es decir, es la pugna por un instrumento de poder: los medios de comunicación, ya que que ellos son los ‘escenificadores’.

Mendieta postea (un post que, si no cargado de verdad, al menos rebosa inteligencia) que no es de hoy esto de utilizar los ‘medios de escenificación’. En este caso tenemos que decir, en honor a la verdad, que este comentario no es tan inteligente como obvio, porque es una verdad que nadie puede desmentir.

EL mismo Verón peca aquí de ingenuidad al decir que sea la conciencia de ‘la necesidad de usar los medios’ por parte de los neopopulismos lo que lleva a esto, porque no sólo los viejos y tradicionales populismos lo hicieron, también los que no son populistas lo han hecho. No parece haber entonces –pese a la inteligencia destilada en la respuesta- dado en la tecla exactamente.

Mucho menos inteligente sería decir que hay un conflicto como cualquier otro y que, como es como los demás, deberíamos tomarlo como al resto, pero es lo que vamos a decir. Así, en vez de preguntar “¿Por qué estos fenómenos neopopulistas están asociados a un conflicto con los medios de comunicación? ”, preguntamos ¿cual es la esencia del conflicto que hay entre los gobiernos de determinado signo y los medios de determinadas características?.

Puede que nuestra pregunta no sea tan inteligente como la anterior, pero eso no es algo que nos importe. Por que antes que la vanidad intelectual de mostrarse inteligente está la verdad, la misma que los medios desprecian día tras día. Además, hay qe decirlo, es propio de los intelectuales reaccionarios reclamar el monopolio de la inteligencia, negándosela a sus adversarios. Pero de nada sirve la inteligencia si se obstina en despreciar las cosas como son.

Queda entonces nuestra pregunta, solo que no es una mera cuestión intelectual. Y esto es importante: qué sea este conflicto sólo podremos decirlo con seguridad después de que la historia lo haya superado, de la manera que sea. Mientras tanto sólo podemos dar tentativas parciales de respuesta, más parciales mientras más se se está cerca de los principales interesados en el conflictos, donde debe contarse no sólo a los funcionarios del gobierno sino a los ‘grandes medios de comunicación’ y los suyos y, más que nada, a los de el gran medio argentino.

jueves, 21 de abril de 2011

Economía Moral

Hace ya un tiempo tuvimos un interesante intercambio en el blog ¿Quién lo paga? a partir de este post. Surgió una cuestión que me parece ver escrita cada vez con más frecuencia entre los comentaristas de blogs.

La manera más facil de tomar el tema me parece viendo como se entrecruzan, o se "mezclan", las disciplinas económica y política. Madoff pretende que está demostrado que para tener éxito en la política un oficialismo debe tenerlo en la economía. En realidad, lo que pretende Madoff es que el éxito político de un oficialismo tiene lugar si y sólo si tiene también uno económico.

Lo primero que habría que preguntar es ¿es esto economía o es política, o es alguna otra disciplina? Es decir, lo que dice Madoff ¿es parte del objeto de estudio de la economía, de la política o de qué?

Salténdose la pregunta, el bloguero responde con el método al que nos tienen acostumbrados los economistas: gráficas superpuestas a ejes con coordenadas cartesianas. Una función representa la evolución histórica del voto oficialista, la otra el crecimiento (o no) del producto. Está claro que un estudio serio del tema trataría de despejar la intervención de otros factores de peso, lo cual pueden ser políticos como económicos, porque, la economía ¿es sólo el crecimiento del PBI? No sabemos la respuesta, pero esperamos que no.

Lo llamativo de la demostración en cuestión es que sirve a los fines de contraejemplo de su postulado: en el año '95 el oficialismo sale airoso pese al mal desempeño en cuanto a evolución del PBI. También es llamativo cómo se desprecia este dato, diciendo que es "excepción que confirma la regla", cuando a en realidad no conozco ninguna excepción que confirme ninguna regla, pero bueno. Es verdad que la informalidad del blog da ciertas libertades (no voy a entrar en la cuestión pero la gramática es un mal ejemplo para el caso, porque se trata justamente de una disciplina superada por la lingüística por esas mismas cosas).

¿Qué puede decirse entonces, que la política puede remarla en un contexto de peniria económica; o acaso que la política misma puede ser capaz de motorizar a economía? Ambas posibilidades son absolutamente probables, y deberían ser tenidas en cuenta. Más en el ámbito de la Economía Moral.

¿Pero qué es la economía moral? Es una categoría que surgión en el diálogo de marras, esa disciplina en la cual se dicta el deber ser de los ministros de economía y los gobernantes con respecto a su ocupación: la política económica. (Después de escibir el post me entero de que se existía la denominación, pero para una cosa distinta, así que la voy a mantener hasta que se me ocurra una mejor)

La economía moral cuenta con dos enfoques: el enfoque retrospectivo, que busca un culpable de las penirias económicas, o un salvador, responsable de las bonanzas, con el único fin de influir en las performances políticas actuales; y el enfoque prospectivo, que se ocupa generando pronósticos preocupantes para alarmar respecto de las políticas económicas que se alejan de determinados lineamientos, se los llame "modelo" (como el kirchnerismo a su política); o "recetas" (como se las llamaba a las "recomendaciones" del FMI cuando se cumplían); ya "cirujía sin anestesia", etc. Es decir: cualquier intervención del ejecutivo en el mercado.

Pero la división entre ambos enfoques es teórica y en la practica muchas veces avanzan de manera conjunta. La inseparabilidad de las mismas es tal vez la misma que entre la economía y la política.

Un ejemplo. El modo más simple de la mezcla es el paro: una idea mueve a un grupo de actores económicos a no cumplir con sus empleadores. El paro ¿es político o es económico? Vemos que se trata de un falso problema. Sólo que este ejemplo no es cualquiera: invierte los términos habituales poniendo a los que suelen preferir la visión economicista en una políticista y vice versa.

Algo parecido pasaría si a un grupo de fabricantes se le ocurriera guardar el stock, después de acordarlo, para generar el desabastecimiento de alguna ciudad o lo que fuera.

Supongamos que -lo cual es lo más común- que sea un hecho económico, no político ¿qué ocurriría se se hiciera, además, con el fin de perjudicar a una fuerza política? ¿O para favorecer un "relato"?

Para completar nuestra categoría de economía moral con la de "doctrina económicomoral", que es el la doctrina que sirve a los fines de establecr el deber ser de intervención del ejecutivo en la economí para servir de referencia tanto al enfoque prospectivo como al retrospectivo de la economía moral.

En cuanto a la economía positiva, se dijo que era el estudio de los hechos empíricos de la economíca. Pero el tema es ¿esta afuera ésta de la economía moral? ¿Cómo va alguien a ver que, como dice Madoff, la economía anda bien cuando desacuerda moralmente con las intervenciones que haga el gobierno en la economía?

Sin embargo, como dijimos en otra parte, la economía positiva es una ética en sí misma.

sábado, 9 de abril de 2011

El uso político de la 'seguridad' por la derecha.

Es común que quienes están procesados en juicios de lesa humanidad (como lo hizo Videla) consideren que este gobierno hace un uso político de los derechos humanos, expresión que además se encuentra con frecuencia en editorailes y notas de opiniión de La Nación, por citar algunos ejemplos.

De lo que no se suele hablar tanto es del uso político del tema seguridad, y si se lo hace es de manera muy general. Ahora, la ministra Garré se refiere al asunto pero con indicaciones más precisas, que quizá anticipen un viraje en el debate respectivo.

En esta nota de Tiempo Argentino figuran algunos comentarios de la ministra sobre lo que es según ella la situación de la Policía Federal:

'la Policía Federal es “el problema más serio y más complejo” que enfrenta el gobierno en materia de seguridad'.

“Cuando se dice ‘esa comisaría recauda bien’, quiere decir que extorsiona bien a los comerciantes a los que les pide dinero a cambio de protección, y a los inmigrantes que no tienen sus papeles en regla, y a los vendedores ambulantes para no molestarlos, y a las cocinas de droga para hacer la vista gorda”

“Hay sectores que disputan, no sobre posiciones ideológicas o modelos de acción, sino sobre el predominio en determinadas zonas o determinados negocios”

Respuestas:

PF Carlos Brown, jefe de campaña de Eduardo Duhalde, 'calificó sus dichos como “una barbaridad”'.

PRO Jorge Macri, precandidato a gobernador del PRO en Buenos Aires: “Es la máxima autoridad de la Seguridad en el país, no puede comentar este tipo de cosas como si fuese un simple vecino sin capacidad de resolverlas”

CC Griselda Baldata, diputada titular de la comisión de Seguridad Interior: 'dijo que “coincidía con el diagnóstico” sobre los nichos de corrupción en la Federal, aunque aclaró que era “crítica en cuanto a la metodología utilizada para modificar eso”'.

FPV Cabandié: "Pareciera que ustedes (por el PRO) están interesados en que no hagamos las transformaciones necesarias"

jueves, 7 de abril de 2011

Alfonsín habla de los medios, en particular, Clarín.

Seguramente el lector conocerá este disurso, muy interesante, por cierto. Recordalo no le vendrá mal, seguramente.

"siempre junto a la urbe"